INVERSIONISTAS
Además del cuerpo de accionistas, perpetuamente comprometido con el desarrollo y las tareas de explotación de
la organización, ocasionalmente damos la bienvenida a personas, empresas e instituciones que buscan el colocar
activos en nuestros esquemas de trabajo e inversión.
El beneficio es mutuo, ya que nos permite tener mayor amplitud y alcance en los proyectos y negocios,
reportando a la vez a ellos rendimientos y beneficios superiores a los de la banca de inversión convencional.
Los tratos son claros y de buena fé. Se basan en la confianza entre las partes, el entendimiento
del negocio en el que se invertirá y de sus objetivos, así como del capital ó activo aportado y las
expectativas -siempre claras y precisas- de beneficios.
Nuestra organización siempre aprecia la confianza depositada y cumple rigurosamente sus compromisos.
La certeza del inversionista se apoya en el respaldo y garantía que otorga Rein a su inversión con el proyecto
mismo, los resultados y en su caso con sus mismos activos.
Nuestros inversionistas siempre reciben la reintegración del capital/activo y sus beneficios en las fechas
y términos estipulados.
Así, esta relación simbiótica es del corte ganar-ganar.